Chinches de cama: Qué son y cómo eliminarlas | Blog Nubett

Chinches de cama: Qué son y cómo eliminarlas | Blog Nubett

Las Chinches y los colchones

Les gustan los colchones debido a que se alimentan de la sangre humana. Sabemos que este es un tema poco agradable, pero es necesario conocerlo. Sólo así podremos evitar infestaciones. Encuentra todo lo que necesitas saber acerca de las chinches de cama y de cómo eliminarlas, aquí en el blog de Nubett.

 Las chinches de cama se encuentran entre los insectos más molestos que podemos encontrar dentro de una habitación. Se dedican a colonizar los colchones (y otros muebles tapizados) y a atacar con picaduras a quienes duerman en ellos. Aunque no lo parezca, las plagas de chinches de cama están siendo cada vez más frecuentes en la actualidad. Hasta mediados del siglo XX este tipo de plaga fue muy común, pero en las décadas del 40 y del 50 de dicho siglo, se lograron controlar bastante. Esto se debió a la aparición de los insecticidas químicos elaborados con dicloro-difenil tricloroetano, más conocido como DDT (hoy en desuso debido a que daña la capa de ozono).

Desde el año 2000, las chinches de cama han vuelto a tener protagonismo en muchos hogares, hoteles, residencias, albergues, o en cualquier otro lugar donde habiten humanos. Se piensa que, en parte, ello se debe a que ya no se usa el DDT en los insecticidas, y además a que esos insectos se han hecho más resistentes. Lo cierto es que, según la Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (ANECPLA), las chinches de cama son la plaga que más ha crecido en los últimos 5 años. Existe el prejuicio de creer que las chinches sólo aparecen en sitios donde hay poca higiene, pero esto es un gran error. Estos insectos pueden establecerse en cualquier casa, e incluso en los más limpios hoteles de lujo.

En el artículo de hoy queremos que conozcas por qué salen las chinches de cama y cómo eliminarlas sin necesidad de tirar tu colchón. También hablaremos acerca de cuáles son sus características y costumbres. En Nubett estamos comprometidos con que tengas un descanso de calidad, y por cierto que las chinches de cama atentan contra ello. Hoy te presentamos todo lo que necesitas saber sobre estos parásitos, así como te daremos consejos para que, una vez erradicados, no vuelvan más.

Orígenes y evolución de las chinches de cama

Tal vez te hayas preguntado: ¿De dónde proceden las chinches de cama? Actualmente estos pequeños insectos están desperdigados por todo el planeta. Aunque causan más estragos en zonas con climas templados, también son capaces de habitar en climas tropicales. Se cree que las chinches de cama son oriundas de las cuevas del Medio Oriente, y que, con el paso de los años, viajando escondidas entre telas, ropas o colchones, junto con los humanos, se fueron propagando por todo el mundo.

El fósil más antiguo de chinche del que se tiene noticia data de hace 50 millones de años, cuando todavía los dinosaurios habitaban la tierra. De esta chinche, apodada como “asesina”, pueden haber derivado evolutivamente las que conocemos hoy en día. Las chinches ya existían antes de que el ser humano pisara la tierra. No caben dudas de que la parasitación de las chinches a los seres humanos es tan antigua como la humanidad.

Una buena parte de los científicos que estudian este tema, creen que las chinches de cama provienen de la época de los cavernícolas, hace 240 mil años aproximadamente. Todo parece indicar que éstas son una derivación de las chinches que en las cuevas se alimentaban de los murciélagos. Las chinches de las cuevas empezaron a alimentarse también de los humanos, y poco a poco fueron evolucionando hasta la forma que tienen hoy.

Un dato que avala esta teoría es que en la forma y la genética de las chinches de cama y las de los murciélagos, no hay muchas diferencias. De hecho no se consideran especies distintas. Sin embargo, la chinche de cama ha ido evolucionando, modificando sus costumbres y su fisionomía junto a su huésped favorito, el ser humano. En algún momento puede que las chinches de murciélago y las de cama sí se conviertan en especies distintas.

 

Como hemos visto, las chinches de cama son tristemente célebres en la sociedad desde hace mucho tiempo. Han pasado a formar parte también del argot popular más actual, figurando en varios de los refranes españoles:

·        “Ser más pesado que una chinche”.

·        “El curial y las chinches, de cualquier sangre se hinchen”.

·        “La chinche, viva, muerde; y muerta, hiede”.

En dichos como estos, se puede entrever el desagrado de los pueblos hacia esos parásitos, y con toda la razón del mundo. Ya veremos por qué.

¿Qué son las chinches de cama?

Las chinches de cama se conocen por el nombre científico de Cimex lectularius, y pertenecen a la clase de los insectos. A su vez se clasifican dentro de la orden de los hemípteros, palabra griega que está compuesta por las partículas hemi, que significa ‘mitad’ y pteron, que significa ‘ala’. En el cuerpo de las chinches, donde deberían estar las alas, se encuentran una sección basal dura y una sección distal membranosa, por lo que no pueden volar. Por su proceder, las chinches de cama son ectoparásitos. Esto significa que viven en la superficie de su víctima, o sea, que su acción no ocurre en el interior del organismo atacado sino en el exterior. El huésped, en este caso el ser humano, es el organismo del cual las chinches se alimentan mediante picaduras, lo cual puede provocar picazón, escozor, o incluso alergia en algunas personas.

Cómo son las chinches de cama

Las chinches de cama tienen una cabeza corta y ancha, con un cuerpo ovalado y plano que se deprime dorsoventralmente. Los ojos resultan prominentes para sus proporciones. Tienen todo el cuerpo cubierto por vellos cortos y finos. Cuentan con 3 pares de patas que son más bien delgadas, aunque bien desarrolladas. Por este motivo, aunque no vuelan, pueden desplazarse con rapidez. Existen algunas diferencias morfológicas entre las hembras y los machos. Las hembras tienen un abdomen ovalado y simétrico, mientras que los machos lo tienen un poco más alargado y asimétrico.

Su aparato bucal tiene una estructura que le permite succionar, y son hematófagas, es decir, se alimentan de sangre corporal. Las chinches tienen una mayor actividad durante las noches que durante el día, aunque eso no quiere decir que no actúen también en horario diurno. Lo que atrae a las chinches de cama hacia su huésped, es el calor que despide el cuerpo humano. En principio es una atracción eminentemente táctil, ya que no cuentan con órganos sensoriales bien desarrollados. También la traspiración y la expulsión de dióxido de carbono son indicadores humanos que atraen a las chinches.

Tamaño y colores de las chinches de cama

El tamaño y color de las chinches de cama varía según la etapa de vida en la que se encuentren. Por otra parte, los machos y las hembras adultos difieren en el tamaño también. Es lo que se denomina dimorfismo sexual. Una chinche adulta, sea macho o hembra, tiene un rango de longitud que va de 5 a 10 mm. Las hembras son siempre unos milímetros más grandes que los machos. Las chinches más jóvenes, llamadas ninfas, atraviesan por varios períodos de desarrollo, durante los cuales poco a poco van alcanzando las características de la etapa adulta:

·        Tamaño en la 1ra fase ninfal: 1mm.

·        Tamaño en la 2da fase ninfal: 2mm.

·        Tamaño en la 3ra - 5ta fase ninfal: 3-5mm.

La coloración de las chinches de cama cambia en cada una de las etapas de su vida, hasta la adultez. Cuando están en las primeras etapas de ninfas, tienen un color transparente o traslúcido. Este color se va oscureciendo a medida que crecen, hasta llegar a la edad adulta, en la que adquieren una tonalidad marrón oscuro. Incluso cuando se alimentan cambian de color y se acercan a un tono rojo mate.

Ciclo reproductivo de las chinches de cama

Si algo caracteriza a las chinches de cama, es que se reproducen a mucha velocidad. Esto explica por qué, cuando una o dos parejas de chinches logran establecerse en un mueble o colchón, a los 2 o 3 meses estará repleto de ellas, si no se toman medidas a tiempo. Una chinche hembra es capaz de poner de 5 a 12 huevos cada día. En toda su vida podrá poner entre 200 y 500 huevos.

Los huevos tienen un aspecto blanquecino translúcido, y son ovalados y algo curvos. Miden 1 mm de largo y 0,5 mm de ancho. Los huevos quedan pegados a la superficie donde hayan sido depositados, ya que incluyen en la superficie una sustancia adherente. La incubación ocurre en un rango de 6 a 20 días. La rapidez con la que nazca la nueva chinche del huevo dependerá de las condiciones ambientales, tales como la temperatura y la humedad.

Una vez nacida la chinche, tardará de 7 a 18 semanas en llegar a la edad adulta. Mientras, se desarrolla y atraviesa las diferentes etapas de ninfas que vimos arriba. Las ninfas deben consumir sangre para poder crecer y atravesar los diferentes niveles de su crecimiento. Por eso es que pican al ser humano.

Inseminación traumática y colonización de nuevos espacios

Hay un detalle importante, y es la forma en la que se reproducen las chinches de cama. Se conoce como inseminación traumática o inseminación hipodérmica. Este término biológico hace referencia a la manera en la que el macho fecunda a la hembra. El macho abre una herida en la cavidad abdominal de la hembra, para poder introducir su pene dentro del abdomen e inyectar el esperma en su interior.

El esperma viaja a través de la hemolinfa (la “sangre” de los invertebrados) y se difunde por todo el organismo de la hembra, hasta que logra llegar a los ovarios. En este momento es que se fecundan los huevos. La herida en el abdomen de la chinche se queda abierta, y la hembra puede llegar a morir si la abertura se infesta (algo que ocurre con bastante frecuencia).

La inseminación traumática provoca que muchas hembras salgan del nido que habitan y busquen nuevos espacios libres de machos. De este modo evitan que se les reabra la herida y logran sanarse. Pero esto funciona a la vez como una manera de expansión, por lo que en poco tiempo el mueble, el colchón o la cama estarán totalmente colonizados por las chinches.

Hábitos alimenticios de las chinches de cama

En el caso de las chinches de cama, su régimen nutricional es hematófago. Esto significa que se alimentan de la hemolinfa de otros insectos, o de la sangre de animales calientes, como los mamíferos. Es por eso que los seres humanos somos huéspedes ideales para ellas. Como comentamos antes, las chinches de cama tienen una estructura bucal que les permite perforar la piel y succionar la sangre para obtener su alimento.

Es en la cabeza de las chinches donde se encuentra su aparato bucal, que tiene forma de pico acanalado en el que se guardan 4 estiletes muy finos. Estos estiletes son los que permiten la inserción de la boca de la chinche en la piel. Al penetrar en la piel, entran en funcionamiento dos conductos: a través de uno chupan la sangre, y a través del otro inyectan una saliva que contiene sustancias anticoagulantes y anestésicas. Son estas sustancias las que, una vez inyectadas debajo de la piel, provocan las ronchas y escozores que surgen después de sus picaduras.

Un dato curioso es que las chinches no tienen la necesidad de alimentarse diariamente. Cada chinche puede alimentarse una sola vez en un período de entre 5 y 10 días aproximadamente. El tiempo que este parásito demora en succionar la cantidad de sangre que necesita puede variar. Las chinches ninfas requieren de unos 3 minutos de succión, y las adultas pueden tardar entre 5 y 10 minutos en completar la dosis de sangre que necesitan. Por eso es que tienen que usar anestesia y anticoagulante que enmascaren el proceso de picado y succión.  De lo contrario nunca lograrían su objetivo.

Por otro lado (y este es uno de los factores que hacen más difícil erradicarlas), las chinches pueden pasar hasta 6 meses sin consumir alimento. Supongamos que descubres una plaga de chinches y a continuación necesitas irte de viaje unos meses. Crees que a tu regreso las chinches ya habrán muerto por inanición. Pero eso está lejos de ser verdad. La inanición no les hace demasiada mella si dura menos de 6 meses. De ahí que los mejores métodos para librarnos de ellas sean acciones de limpieza y desinfección profundas.

¿Cuáles son las enfermedades que transmiten las chinches de cama?

Querer conocer las enfermedades que transmiten las chinches es bastante normal y frecuente cuando descubrimos que las tenemos en el dormitorio. Sin embargo, no se ha demostrado que estos parásitos trasmitan enfermedades, al menos en Europa. Si bien pueden albergar dentro de sí unos 40 tipos de patógenos que afectan al ser humano, las chinches de cama no tienen la capacidad de transmitirlos, a diferencia de otros insectos hematófagos (como los mosquitos).

Aunque es un hecho que el 65 % de las personas no sufren ninguna reacción alérgica producto de las picadas de las chinches, ni desarrollan marcas o signos de haber sido picados, hay un buen número de personas para las que las picadas de chinches pueden convertirse en todo un problema. Por ejemplo, existe riesgo de infección, ya que la piel queda vulnerable y podría alojarse dentro algún patógeno. Sin embargo, normalmente el mayor daño que causan las picaduras de las chinches de cama, es irritación con fuerte escozor, granos, enrojecimiento e inflamación de la piel.

Un caso aparte son las chinches de cama que radican en ambientes tropicales. Estas sí son vectores de enfermedades que pueden llegar a ser muy graves para el ser humano. La más terrible de estas enfermedades es la tripanosomiasis, también conocida como el “mal de Chagas”. Esta enfermedad es transmitida por un protozoo, el Trypanosoma cruzi, que puede ser albergado y transmitido por la chinche en un plazo de tiempo de hasta 97 días. Las consecuencias a largo plazo del mal de Chagas, cuando no se atiende a tiempo, pueden ser nefastas.

Otro campo de la salud que se ve muy afectado por la plaga de las chinches de cama, es la calidad del sueño. Dormir en una cama con chinches es un motivo de interrupciones constantes del sueño. El picor en la piel después de las succiones de una chinche puede hacernos despertar en medio de la noche. Dormir y despertar por la desagradable sensación de escozor todas las noches, puede convertirse en una verdadera pesadilla de insomnio y ansiedad. Por otra parte, las interrupciones de sueño disminuyen la calidad del descanso, y eso puede convertirse en otra fuente de problemas de salud.

¿Por qué nos invaden las chinches de cama?

Se ha creído durante mucho tiempo que las chinches de cama aparecen en lugares que no tienen buena higiene. Sin embargo, el tiempo ha demostrado que esta idea es un gran prejuicio, muy alejado de la realidad. Posiblemente querrás saber por qué motivos las chinches nos invaden. La respuesta es muy simple y de algún modo ya la hemos dado: somos su alimento. Las chinches ocupan una cama, un sofá o una alfombra, para estar cerca de su fuente de alimento. La cama es el lugar preferido de las chinches, porque sobre ella pasamos 8 horas diarias. Esto les da posibilidades diarias mucho mayores de completar la succión de sangre.

Lo que acabamos de explicar nada tiene que ver con la higiene o con la falta de higiene. Estas son cosas que para las chinches no tienen la menor importancia. No obstante, mantener la buena higiene y el orden en la cama y el equipo de descanso, contribuye a que las chinches no encuentren escondites, cosa que será mucho más fácil de encontrar en espacios desordenados y con desechos o suciedad.

También el uso frecuente de aspiradoras, ayuda a eliminar los posibles huevos de chinche, que son casi invisibles. En cambio, si no se mantiene una higiene frecuente, las chinches pueden proliferar. No por la suciedad misma, sino porque los huevos permanecen y no se corta su ciclo de reproducción. De cualquier modo, las chinches pueden atacar cualquier sitio, sea un hotel 5 estrellas, o una habitación limpia y ordenada o sucia y desaliñada.

Cómo detectar la presencia de chinches de cama en el dormitorio

Detectar la presencia de chinches de cama es una tarea bastante sencilla, aunque tiene sus particularidades. El indicador más eficaz para saber si hay chinches de cama en el dormitorio son sus excrementos. Éstos aparecen como pequeñas manchas de color negro u oscuras que se depositan en la superficie del colchón, del somier, almohadas, colchas o muebles tapizados. Los excrementos se pueden encontrar cerca de la zona que más usamos de dicho inmueble o accesorio.

Sin embargo, lo más determinante para saber si tenemos una invasión de chinches de cama es poder localizar al insecto en sí. Estos ectoparásitos suelen esconderse dentro de los pliegos de las telas o del colchón, para salir a realizar su actividad succionadora, en la noche por lo general. Por eso es importante revisar con ayuda de una linterna los rincones del mueble, incluso a veces una lupa puede ser de mucha utilidad para descubrirlas. Aunque la mayoría de las chinches adultas se pueden percibir a simple vista.

Otro factor indicador es el hallazgo de las exuvias, que son los restos de la cutícula que desprenden cuando mudan la piel. Esto ocurre en cada una de las fases de crecimiento, justo antes de pasar a la siguiente. Además, amanecer con varias picaduras en forma de ronchas rojas en una misma área del cuerpo, es otro factor que nos indica la presencia de chinches de cama.

De qué manera llegan las chinches a la casa

Estos parásitos utilizan muchos mecanismos para colonizar nuevos lugares. Uno de ellos es viajar en las maletas, alojarse en los zapatos y ropas, caminar por los cables eléctricos, etc. Así pueden entrar cualquier día a tu casa. Como no vuelan y son rastreros, se irán deslizando poco a poco hasta llegar a localizar el lugar perfecto de la casa donde poder alimentarse de su huésped. Veamos cuáles son algunos de los factores que favorecen la expansión de estos parásitos.

·        Viajes internacionales: Aunque no lo parezca, las chinches pueden desplazarse de un país a otro. Una maleta de viaje es el lugar ideal para esconderse y llegar a puerto luego de un viaje. En estos tiempos, en que los viajes internacionales están a la orden del día, las chinches encuentran una buena oportunidad para expandirse.

·        Prohibición del DDT: El DDT era un componente que se comenzó a utilizar en desinfectantes durante la década del 40 y el 50. Este principio activo realizaba una erradicación muy eficaz de las chinches de cama, tanto, que a los pocos años de usarse, las chinches pasaron a ser una plaga del pasado. Sin embargo, hace pocos años el uso de DDT y sus derivados fue prohibido, debido al gran impacto negativo que tiene sobre el medio ambiente. Se cree que la reciente proliferación de las chinches está relacionada con la aparición de la ley que prohíbe el DDT.

·        Se han hecho más resistentes a los insecticidas: La especie se ha vuelto genéticamente más resistente a los insecticidas. Y como los que se fabrican hoy en día han perdido buena parte de la potencia de antaño, el efecto que tienen, más que eliminarlas, es estimular que se esparzan aún más.

·        Son difíciles de detectar: A las chinches les encanta esconderse entre los pliegues del colchón, o cualquier otro lugar. También en lugares menos esperados como los marcos de puerta, cortinas de ventanas, las patas de la cama, etc. Esto hace que sean difíciles de encontrar cuando no hay muchos ejemplares todavía. Por tanto, se corre el riesgo de tener una mayor infección de chinches por no atajarlas a tiempo.

·        Tirar mobiliario afectado a la calle: Una medida desesperada y nada recomendable cuando detectamos la presencia de chinches, es deshacernos de la cama o el mobiliario. Resulta que esto lo único que logra es que la plaga se propague más fácilmente. Por otro lado, con que quede una sola chinche escondida en el lugar menos esperado del dormitorio, de nada habrá valido tirar nuestro mobiliario, porque el nuevo volverá a infestarse muy pronto.

Consejos para eliminar las chinches de cama

Eliminar las chinches de cama puede ser una tarea bastante compleja y laboriosa. Es por eso que muchas personas prefieren deshacerse de su colchón o de los muebles cuando han quedado infestados por las chinches. Pero esta no es la solución más adecuada, ya que, al tirar los objetos contaminados, estaremos contribuyendo a la propagación de la plaga. Y más si alguien reúsa los muebles que hemos tirado y los introduce en otro hogar.

Además, es absurdo pensar que con sólo tirar el mueble o el objeto contaminado nos habremos librado de las chinches. Estas pueden haber empezado a colonizar cualquier otro espacio de la casa, y con que quede solamente una hembra fertilizada, será suficiente para repoblar la habitación. Eso por no hablar del tremendo gasto que va a representar para nuestro bolsillo tener que comprar un nuevo equipo de descanso y sus accesorios, sobre todo si a los desechados aún les quedaban buenos años de vida útil.

Los más indicado cuando hay una invasión de chinches es eliminarlas lo antes posible. Por eso, ante la más mínima sospecha de su aparición, debemos actuar, y así evitar que proliferen demasiado. Es más fácil eliminar la plaga cuando aún está iniciando que cuando la población ya lleva mucho tiempo aumentando. Esto se cumple sobre todo cuando las chinches están propagadas y han colonizado varios espacios de la casa, ya que pueden esconderse en zócalos de pared, en marcos de ventanas y puertas, adornos colgantes, apliques o lámparas de luz, cortinas de ventanas, tomas de teléfonos, cables, etc. Veamos entonces qué podemos hacer contra el ataque de las chinches de cama.

Técnicas profesionales para eliminar las chinches de cama

Ante la sospecha de chinches, llama a un equipo de profesionales

Lo más recomendable es dejar el control de esta plaga en manos profesionales. En España existen varias empresas que se dedican al control de las chinches de cama; por sólo nombrar algunas, tenemos: Anticimex, DISET, BASF. También podemos contactar con alguna empresa a través de sitios web con guías de empresas, y asociaciones como la ANECPLA (Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental) en las que se reúnen varias de las empresas del ramo del control de plagas, incluidas las chinches.

Según los especialistas, se necesitan mucho más que un insecticida o un producto doméstico para combatir a las chinches de cama. Es por eso que, en cuanto tenemos la sospecha de ser atacados por chinches, debemos contratar lo más rápido posible sus servicios. Si nos lanzamos a aplicar algún producto por nuestra cuenta, lo único que podríamos logar es que la plaga se esparza por toda la casa, o incluso hasta los hogares más cercanos.

Existen 3 formas básicas que los profesionales suelen usar cuando van a exterminar una plaga de chinches. Estos métodos por lo general se aplican combinados. El sistema de complementación va a depender del nivel de infestación que tenga el espacio, algo que el ojo adiestrado de un profesional pude atisbar. Veamos entonces las maneras más usadas por los profesionales para acabar con esta plaga.

Métodos mecánicos para la eliminación de las chinches de cama

Es un sistema mecánico que consiste en la eliminación física de todos los individuos de la plaga de chinches, desde los adultos hasta cualquiera de las etapas de ninfas o de huevos. La herramienta más utilizada para llevar a cabo este método es una potente aspiradora. Este método debe complementarse con cualquiera de los dos siguientes, para evitar que queden individuos ocultos que puedan propagarse más adelante.

Métodos químicos para la eliminación de las chinches de cama

Este método utiliza insecticidas químicos que causan la muerte de los individuos de la plaga por medio del contacto directo. La mayoría de los insecticidas surten efecto si llegan al lugar donde se esconden las chinches. Debido a que estos parásitos se ocultan muy bien en cualquier pequeño pliego o en lugares de difícil acceso, poder eliminarlas por medio de productos químicos no es tarea fácil. Las formas más usadas son la pulverización localizada y el espolvoreo.

La sustancia más efectiva conocida para la eliminación de las chinches de cama es el DDT, como vimos arriba. Pero por disposición oficial se ha suspendido su uso. Actualmente en Europa se dispone de un número reducido de insecticidas efectivos contra estos parásitos. Algunos de los más utilizados son:

·        Piretrinas naturales: Es un insecticida vegetal natural. Se compone del extracto de piretro, que es una sustancia que se extrae de algunos tipos de flores de crisantemos. Funciona por medio del contacto y genera daños severos y la muerte de los insectos al desestabilizar el funcionamiento de los canales de sodio en las membranas nerviosas. Su mayor desventaja es que tiene muy poca persistencia una vez aplicado.

·        Piretroides o piretrinas sintéticas: Son un grupo de pesticidas obtenidos en laboratorio por medio de síntesis. Tienen una estructura molecular muy parecida a la de las piretrinas naturales. En este grupo encontramos sustancias como la permetrina, la deltametrina, el alfacipermetrina, entre otras. Tienen un efecto un poco más duradero que las piretrinas naturales, pero tampoco son muy persistentes.

·        Carbamatos: Se trata de compuestos orgánicos derivados del ácido carbámico. La única sustancia que está permitida usar de toda esta familia es el bendiocarb. El problema con este tipo de insecticidas (que se empezaron a usar desde la década de los 60), es que muchas poblaciones de chinches de cama se han hecho resistentes a los mismos.

·        Biorracinales: Son insecticidas orgánicos que tienen la capacidad de repeler o matar a los insectos. Se componen por hongos entomopatógenos y extractos vegetales provenientes del árbol del Nim. En este grupo los más usados son los IGR o llamados reguladores del crecimiento. La desventaja es que sólo actúan interfiriendo en el proceso de muda de los insectos.

·        Materiales inorgánicos: Aquí se agrupan varios elementos, en su mayoría minerales, que actúan como insecticidas. Los más usados para atacar a las chinches son la tierra de diatomeas, la sílice o el ácido bórico. Son agentes desecantes que absorben la capa cerosa de los insectos y los llevan a la deshidratación y la asfixia. En algunos casos también funcionan como veneno. Este tipo de insecticidas es ideal para prevenir, pero no tanto para erradicar.

El uso de los insecticidas no es infalible, y por eso, la mayoría de los profesionales los combina con otros métodos, en busca de lograr el resultado perfecto. Algunas de las desventajas de este método son:

a)     Resistencia por parte de las poblaciones de chinches de cama a la sustancia insecticida.

b)     Legislación cada vez más restrictiva con respecto al uso de los insecticidas químicos y naturales.

c)      El efecto repelente de buena parte de los insecticidas puede lograr el efecto contrario. Es decir, en vez de eliminar la plaga de chinches de cama, provocar que se esparzan y se instalen en nuevos territorios dentro y fuera del hogar.

d)     Existe realmente un número muy limitado de productos que se pueden emplear para el control de las chinches.

e)     La mayor parte de los insecticidas que se pueden utilizar tienen muy poca durabilidad o persistencia en el lugar donde se han aplicado. Esto rápidamente deja sin protección la zona desinfectada, y provoca que la plaga pueda reaparecer en un futuro no lejano. Esto se cumple especialmente si no se ha empleado un método insecticida complementario.

Métodos físicos para la eliminación de las chinches de cama

Este tipo de método utiliza los cambios de temperatura para provocar la muerte de las chinches de cama y así eliminar la infección. Se puede emplear lo mismo el calor que el frío ya que estos parásitos sobreviven solamente en un rango de temperatura. Si nos vamos por debajo o por encima de ese rango, podemos provocar su muerte. Sin embargo, los métodos más usados por los profesionales son los que utilizan el calor. Veamos en qué consiste cada uno de estos métodos.

Bajas temperaturas

Se ha demostrado que una chinche de cama, en edad adulta, puede soportar una baja temperatura de hasta de 13 °C. En un ambiente con esta temperatura, el parásito entrará en un estado de hibernación en el que puede permanecer con vida por un largo período de tiempo (hasta 1 año en la mayoría de los casos). Sin embargo, a partir de los -16 °C, las chinches mueren en cualquiera de las fases de crecimiento en la que se encuentren. En el caso de los huevos, pueden resistir por corto tiempo una baja temperatura de -25 °C. Pero si someten a dicha temperatura durante una cantidad adecuada de minutos, también morirán.

Altas temperaturas

Como ya dijimos, este es el método de temperatura preferido por los profesionales. Generalmente este método se pone en práctica después de haber realizado el cepillado y aspirado para eliminar mecánicamente lo más que se pueda de la plaga.

Se ha demostrado que una temperatura de entre 45 y 56 °C será suficiente para exterminar a todos los miembros de la plaga de chinches de cama, incluidos los huevos. Normalmente se emplea una técnica que consiste en vapor seco sobrecalentado hasta 180 °C en el punto de salida, para garantizar que el área a tratar reciba no menos de 80 °C. Veamos una tabla de cómo funciona el método del calor y el tiempo de aplicación necesario.

EFECTO QUE TIENE EL CALOR SOBRE LAS CHINCHES DE CAMA

ETAPA DE DESARROLLO DE LA CHINCHE DE CAMA

NIVEL DE TEMPERATURA LETAL

TIEMPO NECESARIO DE EXPOSICIÓN A LA TEMPERATURA PARA LA ELIMINACIÓN

Chinches de cama en etapa adulta y ninfas.

45 °C de temperatura.

15 minutos de exposición para eliminarlas.

Huevos de chinches de cama.

45 °C de temperatura.

60 minutos de exposición para eliminarlos.

Cualquier estadio de desarrollo del ciclo de vida de las chinches de cama:

Adultos

Ninfas

Huevos.

50 - 56 °C de temperatura.

1 minuto de exposición para eliminarlas.

Técnicas caseras para eliminar las chinches de cama

Existen algunos procedimientos que podemos hacer desde casa, si detectamos que estamos siendo atacados por chinches. Estos métodos caseros no son los más recomendables cuando la infección resulta grave, pero pueden funcionar para eliminar a las chinches cuando dan los primeros indicios de su presencia. Veamos por pasos qué puedes hacer a nivel casero para eliminar las chinches de cama.

1.      Lo primero es inspeccionar bien, linterna en mano, todo el colchón y la ropa de cama. Como ya vimos, las chinches se suelen esconder dentro de los pliegos, en las patas de la base, en el somier, etc. Incluso no está de más mirar en los cables de corriente, dentro del tomacorrientes, las lámparas o apliques de luz, etc.

2.      Cuando logremos detectar dónde están ocultas las chinches, debemos hacer una concienzuda aspiración de toda el área y sus alrededores. Con una aspiradora potente podemos extraer las chinches y los huevos de los escondites.

3.      Luego es imprescindible usar algún método de calor para rematar. Se puede usar la secadora de pelo en la más alta temperatura y pasarla durante varios minutos por toda la zona infestada. Así nos aseguraremos de eliminar los huevos y los ejemplares que puedan haber quedado vivos luego de haber pasado la aspiradora.

4.      También es recomendable poner en agua hirviendo las sábanas y toda la ropa de cama infestada. Luego conviene lavar también con agua caliente, para asegurarnos de que no queden huevos ni ejemplares vivos.

5.      Todos estos pasos deberás hacerlos unas 3 veces por semana, hasta asegurarte de que ya no hay presencia de estos parásitos dentro de la habitación. En caso de que la plaga persista, será inminente la presencia de técnicos o profesionales en el control de plagas.

No recomendamos el uso de insecticidas caseros, porque actualmente en el mercado no hay ninguno cualificado para el control de las chinches de cama. Lo único que podremos conseguir es dispersarlas y hacer que colonicen otros espacios dentro y fuera del h

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