Dormir y descansar: similitudes y diferencias | Blog Nubett

Muchas personas creen que dormir y descansar son lo mismo, ya que en el habla popular ambas palabras se utilizan para referirse al sueño. Pero la verdad es que dormir y descansar no son lo mismo. A veces no nos es posible quedarnos dormidos, debido a que no estamos en el sitio adecuado; sin embargo, se puede llegar a descansar sin dormir. Otras veces, aunque se duerma, no se descansa del todo. 

Aunque para muchos dormir y descansar son lo mismo, lo cierto es que no es así. Existe una gran diferencia entre estos dos conceptos. Sin embargo, se confunden porque están relacionados entre sí, de alguna manera. Si te preguntas cómo descansar sin dormir, te diremos que hay muchas formas de descansar sin dormir. Por otra parte, tampoco todas las veces que dormimos llegamos a descansar realmente. Pareciera que estamos haciendo un trabalenguas, pero, en este artículo que hoy traemos a nuestro blog de Nubett, dejaremos muy claro cuál es la diferencia entre dormir y descansar.

En Nubett queremos que conozcas a fondo qué es dormir y descansar, para que puedas tener un sueño reparador todos los días. Por eso nos parece que será muy interesante dilucidar la diferencia entre estos dos conceptos. Creemos que aprender cómo descansar sin dormir, es tan importante como lograr descansar profundamente cada vez que se duerma. Hoy te invitamos a conocer las diferencias y similitudes de los conceptos científicos de dormir y descansar, aquí en nuestro blog de Nubett.

Dormir y descansar no son lo mismo

Si bien en el argot popular dormir y descansar se pueden confundir (hasta el punto de que muchas personas creen que son lo mismo), científicamente hablando no son la misma cosa. Para la ciencia, dormir y descansar son dos funciones fisiológicas distintas del organismo. Nuestro organismo puede descansar sin haber tenido que dormir necesariamente; y así mismo, al dormir, no siempre se llega a descansar. Veamos a continuación la definición de dormir y de descansar, para comprender en qué consisten estas dos funciones vitales del organismo de la inmensa mayoría de los seres vivos, incluidos los humanos.

¿Qué es dormir, según la ciencia?

Dormir es un estado complejo del organismo, durante el cual ocurren cambios en la conducta y en el funcionamiento de los diferentes órganos. Todos los seres humanos pasamos entre 1/4 y 1/3 de la vida durmiendo, si bien hay animales que duermen mucho más (aunque no de forma continuada). El ser humano duerme un promedio de 8 horas seguidas dentro de las 24 horas del día, preferiblemente durante el horario que precede al amanecer. Hay que reiterar que, en el caso humano, normalmente se considera que hubo un descanso de calidad si las 8 horas se durmieron de un tirón.

Al dormir el cuerpo permanece inconsciente, en estado de sueño, que es el estado opuesto a la vigilia. El sueño está regulado por el sistema nervioso central, que en ese horario se encarga de realizar solamente las funciones obligatorias para mantener la vida. Si bien al dormir hay bastante inactividad muscular, el cerebro continúa muy activo en las fases REM y no REM I y II del sueño; mientras que emite ondas lentas durante el sueño profundo en la fase no REM III. Dormir es un proceso biológico vital, del cual depende el poder mantenerse en estado de vigilia o diurno. El acto de dormir ayuda a procesar la información nueva acumulada durante el día, a regenerar el desgaste físico y mental, y a mantener la buena salud.

El sueño es una necesidad fisiológica que tiene un impacto directo sobre la salud mental y física. Como ya dijimos, la cantidad de horas recomendadas para dormir al día son 8 aproximadamente, aunque pueden recomendarse más horas según la edad o si hay ciertas condiciones físicas. Además, hay que tener en cuenta que, para que dormir sea realmente efectivo, se debe tener calidad de sueño. El sueño es un proceso cíclico que alterna entre la etapa no REM y la etapa REM, para pasar de nuevo a la primera etapa. Para que el sueño tenga buena calidad, debe lograr atravesar entre 4 y 6 ciclos completos de sueño durante las 8 horas que la persona duerma.

¿Qué es descansar, según la ciencia?

El descanso es un estado de reposo y quietud, una pausa que se toma durante la actividad diurna. Se puede decir que es el estado en el que el cuerpo detiene cualquier ajetreo físico o mental, sin llegar al dormirse. Con el descanso se alivia la fatiga que genera la vigilia, tanto física como mental. El descanso se caracteriza por tener un bajo nivel de actividad fisiológica, ya que es un estado de relajación que ayuda a canalizar la tensión física y mental que produce el estrés. Descansar, también está relacionado con el ocio, que es el momento en el que el tiempo se utiliza a placer y no para realizar actividades obligatorias.

Después de realizar el descanso, el cuerpo recupera la energía perdida y la frescura para continuar con las actividades del día. El descanso se define también como una vigilia tranquila. Es una actividad muy versátil, ya que hay diferentes maneras de descansar. A diferencia de dormir, al descansar sí se está consciente y no se pierde la conexión con el exterior. Pero tanto la mente como los músculos y los órganos del cuerpo permanecen tranquilos. Durante el descanso las habilidades físicas y mentales se ralentizan. Es precisamente esto lo que disipa el estado de estrés, ansiedad o cansancio, y genera un estado relajado, reparador y con más energía.

Cada persona tiene una forma diferente de experimentar el descanso. Por eso, lo que es descanso para unos, no tiene que serlo para otros. Por ejemplo, hay quienes se sentirán descansados al escuchar música relajante, mientras que otros pueden no sentir que esta actividad les genere descanso. El descanso tiene un corto tiempo de duración que oscila entre 5 y 15 minutos. Sin embargo, puede tener una frecuencia alta, ya que se puede tomar un descanso cada 2 o 3 horas de trabajo. Cuando se está trabajando, el descanso debe ser moderado, ya que si se realiza con demasiada frecuencia, puede convertirse en un obstáculo para las actividades, lo que se llama un elemento distractor.

¿Cuál es la relación entre dormir y descansar? Similitudes y diferencias

En este acápite daremos respuesta a por qué dormir y descansar son confundidos habitualmente, aunque sean dos procesos diferentes. Esta confusión se basa en lo común que tienen ambos tipos de procesos. También en que, para lograr dormir, se debe primero entrar en un estado de descanso y relajación. Así mismo, son muchas las diferencias que hay entre dormir y descansar, y estas son las que los hacen ser dos conceptos distintos dentro de la ciencia del sueño. Veamos la comparación.

Similitudes entre dormir y descansar

El motivo por el cual algunas personas identifican dormir y descansar como lo mismo, es porque tienen un punto en común. Dormir y descansar son las dos formas fundamentales que tiene el organismo de relajarse y recuperarse del desgaste del día o de alguna actividad. Las similitudes entre dormir y descansar son las siguientes:

·        Proporcionan relajación física y mental.

·        Brindan una recuperación de la energía y de las fuerzas perdidas.

·        Revitalizan el cuerpo y la mente para continuar con las actividades.

·        Mejoran el estado de ánimo.

·        Son necesidades fisiológicas del organismo.

·        Calman los signos de estrés.

·        La negligencia en cuanto a dormir y a descansar puede provocar problemas de salud mental y física.

Diferencias entre dormir y descansar

La diferencia entre dormir y descansar radica en que el proceso de relajación y recuperación ocurre a niveles distintos de profundidad, y durante un tiempo también distinto. Veamos cuáles son las diferencias entre dormir y descansar:

·        Al dormir, el cuerpo está en un estado inconsciente con respecto a lo que sucede en el ambiente, mientras que durante el descanso no se deja de estar consciente de lo que sucede en el exterior.

·        El acto de dormir suele realizarse una vez en la noche, en un período de tiempo de 8 horas seguidas. En cambio, se puede descansar varias veces en un mismo día, y cada descanso tiene intervalos más cortos de tiempo, que van de 5 minutos a media hora.

·        Al dormir el cuerpo se deshace de todas las toxinas y los desechos de los diferentes órganos, sobre todo el cerebro a un nivel más profundo. Al descansar el cuerpo y la mente se relajan sólo de manera superficial.

·        El sueño ocurre en diferentes etapas y fases, durante las cuales transcurren procesos fisiológicos específicos. Pero descansar no requiere de etapas ni fases, y tampoco se producen cambios fisiológicos marcados.

·        Dormir es un proceso largo y más lento de recuperación, mientras que al descansar se obtiene un alivio inmediato de la actividad del día.

·        Para dormir se necesita de un espacio aislado, cómodo y tranquilo. Sin embargo, para descansar no es obligatorio un lugar aislado, y puede lograrse incluso rodeado de personas.

Tabla comparativa entre dormir y descansar

A continuación, presentamos una tabla en la que realizamos una comparativa entre dormir y descansar, desde la óptica de varios aspectos. La tabla te resultará muy útil para comprender mejor las diferencias y similitudes de ambos estados fisiológicos.

TABLA COMPARATIVA ENTRE DORMIR Y DESCANSAR
CARACTERÍSTICA	DORMIR	DESCANSAR
DEFINICIÓN	Es una necesidad vital fisiológica que alterna con los estados de vigilia, junto con los cuales conforma el reloj biológico o ciclo circadiano de 24 horas. Dormir comienza con un estado de relajación, al que le sigue un estado de consciencia en que se pierde la conexión con el exterior. Hay una inactividad relativa del cuerpo y del cerebro, sobre todo durante el sueño profundo.	Es una condición parcialmente consciente del cuerpo y la mente. No se pierde la conexión con los estímulos del exterior. Se entra en un estado de relajación en el que se ralentizan las actividades físicas y mentales, con el objetivo de liberar el estrés, la ansiedad o el cansancio.
BENEFICIOS	Revitaliza profundamente el cuerpo y las funciones de los órganos. Purifica las conexiones neuronales en el cerebro y el sistema nervioso. Rejuvenece la piel y renueva la masa muscular. Permite que se fortalezcan los procesos cognitivos, la memoria y el sistema inmune. Ralentiza el ritmo cardiaco y la respiración.	Es un proceso de relajación parcial, menos largo y profundo que el que ocurre cuando se duerme. Ayuda a recuperar parcialmente la energía perdida en medio de las actividades diurnas. Después de descansar, la persona se siente más energizada y fresca.
ETAPAS O ESTRUCTURA	El sueño tiene una estructura compleja a partir de la cual ocurren diferentes procesos fisiológicos. Está compuesto por dos etapas fundamentales, llamadas no REM y REM, que se suceden una a la otra formando un ciclo que se repite cada aproximadamente 90 minutos. En una noche de 8 horas de sueño, se tienen entre 4 y 6 ciclos. A su vez, la etapa no REM del sueño se divide en 3 fases: sueño inicial, sueño ligero y sueño profundo.	El descanso no se compone de etapas ni fases, ya que se realiza estando despiertos, sin entrar en estados especiales de consciencia.
¿CÓMO SE PERCIBE EL AMBIENTE?	Disminuye la capacidad de percibir y de interactuar con los estímulos del ambiente. Sobre todo cuando se está en la fase de sueño profundo y en la etapa REM, ocurre una desconexión muy marcada con el entorno.	En el descanso la persona es plenamente consciente de lo que ocurre a su alrededor, porque permanece despierta.
FRECUENCIA	Dormir forma parte del ciclo fisiológico vital y natural de vigilia y sueño. El llamado reloj biológico que desde el interior y con ayuda de los estímulos externos del día y la noche, marca el momento del día como la vigilia y la noche como el sueño. La frecuencia de dormir es de 24 horas. Aquí hacemos una excepción con la siesta que se puede considerar como un tipo de sueño corto que se tiene durante el día.	Se puede descansar en cualquier momento del día, cuando se sienta la necesidad de hacerlo. El descanso depende más de la voluntad de la persona. Se puede hacer o no hacer. La frecuencia puede ser cada dos horas o en cuanto aparezcan los signos de cansancio, somnolencia, estrés, aturdimiento, etc.
TIEMPO DE DURACIÓN	Para poder dormir bien se necesitan entre 6 y 8 horas al día y generalmente se hace durante la noche.	El descanso no requiere mucho tiempo para efectuarse. El tiempo de duración del descanso oscila entre los 5 y los 30 minutos.
NIVEL DE CONSCIENCIA	Durante el sueño el cuerpo y la mente entran en el estado que los psicólogos llaman el inconsciente.	Al descansar no se deja de estar consciente en ningún momento, tanto en el cuerpo como en la mente.
PROCESO DE INCORPORACIÓN	Incorporarse a la vida cotidiana después de dormir es un proceso algo lento. Esto se debe a que la mente y el cuerpo deben sincronizarse y volver a la consciencia normal para pasar de nuevo al estado de vigilia.	Incorporarse a las actividades después de descansar no requiere mucho tiempo, ya que nunca se dejó de estar conscientes.
¿DÓNDE SE REALIZA?	Dormir requiere de un espacio cómodo, tranquilo, sin ruidos ni factores molestos. Se necesita también algún equipo para dormir, como una cama, almohadas, cobertores, etc. También la temperatura del lugar debe ser controlada, ni muy alta ni muy baja.	Para descansar no se necesita un espacio especial. Técnicamente, se puede descansar en cualquier lugar. Lo que sí se recomienda es que el descanso se realice fuera del área donde estamos trabajando. O sea, se necesita de cierto retiro o cambio de espacio, pero no es imprescindible el aislamiento como cuando se va a dormir.
SUEÑOS	Durante la fase REM, al dormir se pueden tener sueños y visualizaciones que recordaremos en el momento de despertar.	En el descanso no aparecen los sueños ni las imágenes. No obstante, durante el descanso algunas personas entran en un estado en el que perciben la realidad o su mundo interior de una manera diferente, a lo que le llaman soñar despierto.

 

¿Cómo saber si se debe dormir o descansar?

Nuestro organismo envía diferentes señales que indican si se necesita dormir o descansar. Aunque esta experiencia es casi instintiva, es bueno aprender cómo detectar si necesitamos dormir o descansar. Las señales de que el cuerpo necesita dormir son más obvias que cuando necesita descansar. Sin embargo, no debemos ignorar las señales en ninguno de los dos casos, ya que esto solo agravaría la situación creada por las necesidades fisiológicas de dormir y descansar. Veremos en este acápite cómo el cuerpo indica lo que necesita en cada circunstancia.

Señales de que necesitamos dormir

La falta de sueño es sumamente peligrosa para la salud mental y física. Esto se debe a que existen procesos de limpieza y purificación que el cuerpo puede realizar únicamente mientras está en fase de sueño, y que no se pueden realizar en otro momento. Así mismo, al dormir se ralentizan el ritmo cardiaco y la respiración, lo que evita problemas cardiovasculares. También se controlan los niveles de insulina y glucosa en sangre, y eso es muy importante, ya que evita riesgos de padecer de diabetes tipo II. Debido a la gran importancia que tiene poder dormir, debemos conocer cuáles son las señales que nos indican que ha llegado el momento de hacerlo:

·        Ha llegado el horario: Entre los aspectos que mejoran la higiene del sueño, está tener un horario estable para dormir. Una de las señales que indican que necesitamos dormir, es precisamente que ha llegado la hora de hacerlo según el horario que hayamos establecido. Es generalmente en la noche, y 8 horas antes de la hora de levantarse al día siguiente. Así que, si nuestro cuerpo está enviando las señales en este horario, significa que debemos ir a dormir.

·        Disminuye la concentración: Si llega ese momento después de las actividades en el que perdemos capacidad de concentración y estamos más lentos mentalmente, es un indicador de que necesitamos dormir. La falta de sueño afecta directamente el rendimiento cognitivo.

·        Sentir más emociones de lo normal: Las emociones pueden verse alteradas por la falta de sueño. Un estado de inestabilidad emocional, como puede ser el pasar de la alegría a la tristeza sin motivos aparentes, puede indicar que necesitamos ir a dormir. Lo mismo puede decirse si sentimos que nos afecta más de lo normal alguna situación que regularmente no lo haría. Son algunos de los indicadores emocionales de que ha llegado el momento de dormir.

·        Cambios de humor: Sentir una mayor irritabilidad es otro de los indicadores de que ha llegado la hora de dormir. El buen descanso tiene un efecto directo sobre el buen humor, y lo contrario también se cumple.

·        Torpeza al realizar las actividades: Cuando el organismo necesita dormir, otro de los indicadores es sentirse más torpe al realizar las actividades. La falta de sueño provoca que el cuerpo pierda atención y no logre permanecer en el estado de alerta. Señales como equivocarse más de lo normal, tropezar con los objetos, realizar las actividades más lentamente, son indicadores de torpeza por falta de sueño.

·        Dificultad para recordar: Si es más difícil recordar eventos, o incluso el nombre de algún lugar o persona, así como una simple palabra, ha llegado el momento de dormir.

·        Bostezo abundante: El bostezo es probablemente una de las señales más claras de que necesitamos dormir.

Señales de que necesitamos descansar

También cuando requerimos un mero descanso (y no necesariamente dormir), el cuerpo envía las señales apropiadas que indican que debemos tomarlo. Lo más probable es que estemos en medio de alguna actividad durante el día, por lo que será preciso interrumpirla para tomas un descanso que mejore nuestras condiciones físicas y mentales. Actualmente muchas empresas han incorporado el descanso a sus actividades, debido a que se ha demostrado que esto aumenta la productividad laboral. Algunas de las señales de que necesitamos descansar son las que veremos a continuación.

·        Agotamiento: Sentirse cansado o agotado durante la jornada laboral, es un indicador de que debemos tomar un descanso. El descanso permitirá que volvamos a las actividades con las energías renovadas.

·        Falta de creatividad: Cuando realizamos trabajos intelectuales y sentimos que no estamos siendo muy creativos, o que no fluyen bien las ideas, es una de las señales de que hay que descansar.

·        Lentitud: Las actividades que requieren destreza manual o física, pueden verse afectadas cuando necesitamos descansar. Signos tales como la lentitud y la falta de movilidad, indican que no nos vendría nada mal un buen descanso.

·        Deshidratación: La deshidratación se puede manifestar como resequedad en la garganta y en la piel. Muchas veces este es un indicador de que el cuerpo necesita tomarse un descanso para relajarse y recuperar las fuerzas perdidas. Tomar agua y descansar será un apoyo suficiente para sentirse mucho mejor y regresar a las actividades.

·        Dolores musculares: Una señal de que necesitamos descansar, es sentir molestias o dolores en los músculos. Quizás la actividad que estamos realizando implique permanecer mucho tiempo sentado, o en una posición poco cómoda. Durante el descanso el cuerpo cambiará de postura y sentirá una liberación que relaja y modifica la posición de los músculos.

·        Estrés y nervios: Sentir la tensión que provoca el estrés y algo de nervios, es señal de que es necesario un descanso. Al descansar el cuerpo, volverá a permanecer relajado y se disiparán las tensiones y los estados de ánimo negativos.

¿Cómo descansar sin dormir? consejos para entrar en estado de reposo

Como ya dijimos, descansar es una actividad versátil que tiene muchas maneras de realizarse. Por eso en este acápite te explicaremos algunas de las formas en las que puedes descansar durante el día, sea cual sea la actividad que estés realizando. El objetivo de esto es lograr entrar en ese estado de reposo que disipa el estrés y renueva las fuerzas y la energía para continuar con las actividades diurnas.

Escuchar música

La música posee un componente rítmico que tiene una gran influencia en el ritmo cardiaco y en la respiración. Es por eso que una de las formas de liberar el estrés, es escuchando música. No se trata de escuchar cualquier tipo de música, sino aquella que esté orientada a la relajación y al descanso, o sea, la que tiene un ritmo más pausado, menos acelerado. Escuchar música libera dopamina, que es un neurotransmisor asociado con el placer, así como también reduce el nivel de ansiedad y libera el estrés, lo que provoca buen humor. Pueden usarse unos auriculares o bien poner la música en algún dispositivo disponible, y de este modo hacer el break necesario dentro de la actividad laboral.

Leer

La lectura es una de las formas preferidas para descansar, ya que a la vez que mantiene en forma las funciones cerebrales, permite conocer otros mundos, espacios e historias. Leer es un acto relajante ideal para tomar un descanso durante la actividad laboral. Mejora el estado de ánimo para el resto del día, y además, brinda muchos beneficios a nivel cognitivo.

Meditar

La meditación tiene amplios beneficios conocidos y demostrados, que abarcan tanto a la mente como al cuerpo. Meditar es una buena forma de tomar un descanso y desconectar de la actividad laboral o de cualquier otro tipo de actividad. Se puede meditar en cualquier lugar, y para hacerlo no hay necesariamente que adoptar ninguna postura. Se puede meditar sentado en una silla, con las manos reposadas sobre los muslos, si bien muchas personas meditan en posturas tradicionales orientales.

Para meditar, los ojos no tienen que necesariamente estar cerrados por completo, ni completamente abiertos. Pueden estar entreabiertos. Se debe evitar mover los músculos del cuerpo y, sobre todo, los músculos oculares. Poco a poco, en medio del ruido mental en el interior, se asomará una paz o un vacío únicos, mientras el cuerpo se va relajando cada vez más profundamente. Se puede meditar durante 5 o 10 minutos para empezar, y hasta 30 o más minutos cuando hay práctica y experiencia.

Hacer Yoga, Tai Chi o Chi Kung

Practicar alguna de estas artes terapéuticas antiguas, que contemplan tanto la salud corporal como la mental, es una buena manera de poder descansar. Ya sea el Yoga de la India, o el Tai Chi o el Chi Kung de China, la práctica será muy beneficiosa para relajarse y liberar el estrés que generan las actividades cotidianas. Unos 15 minutos de practica en cada descanso, mejorarán el estado de ánimo y renovarán las fuerzas para volver al trabajo con más energía. En este tipo de prácticas se logra controlar la respiración y el cuerpo a un nivel profundo, que genera mucha relajación y libera el estrés. Se puede decir que estas prácticas son una meditación en movimiento.

Realizar una pausa para tomar café o té

Otra forma en la que podemos tomar un descanso es levantarnos del área de trabajo o dejar de hacer la actividad que estamos realizando, para ir a tomar un café o un té. El acto de preparar estas bebidas y luego consumirlas, proporciona un estado relajante que desconecta de las actividades durante unos minutos. También es provechoso el efecto estimulante que tienen el café y el té en el organismo, de modo que al volver a las actividades tendremos mayor energía para realizarlas.

Jugar un juego

El juego siempre ha sido una buena manera de descansar de las actividades diurnas. Durante el juego se libera dopamina, que es la hormona de la felicidad y el placer. Esta hormona neutraliza al cortisol, que es la hormona que genera el estrés. Durante un descanso en medio de la actividad laboral, se puede jugar a juegos como, por ejemplo, el tenis de mesa o pimpón, y esto activará los sentidos, y permitirá que el cuerpo se desemperece y libere el estrés producido por la actividad laboral. Además, la interacción con los compañeros de trabajo genera alegría y endorfinas que mejoran el estado de ánimo y reducen la ansiedad.

Tocar un instrumento musical o cantar

Si escuchar música es relajante, el acto de hacer música, ya sea con un instrumento o mediante el canto, es sumamente liberador. Descansar tocando música, ayuda a liberar el estrés que generan las actividades cotidianas, favorece el buen estado de ánimo, aumenta la capacidad emocional y en general produce buen humor. La música mejora la coordinación motora y mental, y fomenta las conexiones neuronales que establecen nuevos caminos cognitivos. Los sentidos también se despiertan y se desarrollan. Según estudios neurocientíficos, tocar música desata tantas interacciones neuronales simultáneas, que lucen como fuegos artificiales dentro del cerebro. Volver a las actividades después de un descanso tocando música, aumentará muchísimo el rendimiento.

Ver algún contenido audiovisual

Disfrutar de algún contenido audiovisual, como por ejemplo una buena película, ayuda a liberar el estrés de las actividades diurnas. Esta actividad es un elixir para los sentidos, que así descansan de los estímulos de la vida habitual y cotidiana, para irse a observar y a experimentar otras realidades. Ver cine es una actividad pasiva que ayuda a distenderse, a desconectar, y produce un descanso de tipo mental. Mejora también la empatía, ya que desarrolla la capacidad de entender diferentes puntos de vista de una misma situación. Así mismo, el cine ayuda a desarrollar la creatividad y a ser más flexibles, y tiene efectos muy positivos en la imaginación.

Tomar una siesta

Tomar la siesta es un gran aliado cuando de descanso se trata, si bien es algo que no se puede hacer en todos los lugares. En la siesta encontramos quizás un punto medio entre dormir y descansar, ya que no se puede considerar un sueño en todo rigor, pero no deja de serlo. Desde la óptica de este artículo (según lo que definimos más arriba como descanso), podemos perfectamente clasificar la siesta como otro de los tipos de descanso que se pueden tomar para relajarse y reponen las fuerzas durante la jornada laboral. Los beneficios de una buena siesta son muchos:

·        Ayuda a relajarse y a liberar el estrés.

·        Mejora el desempeño en las actividades, debido a que acelera el tiempo de reacción y la memoria.

·        Produce un estado de conciencia más atento.

·        Promueve el buen ánimo y la alegría.

·        Disminuye la fatiga mental y muscular.

·        Reduce la tensión arterial.

·        Estimula la creatividad.

Un detalle a tener en cuenta en el momento de tomar la siesta, es que no se debe hacer cerca de la hora de dormir. La mayoría de los especialistas del sueño recomiendan tomar la siesta entre las 12 del día y las 3 de la tarde, para que no interfiera con el sueño nocturno. Lo otro será evitar que el tiempo de la siesta se alargue más allá de los 40 minutos.

Resultados científicos que demuestran la importancia del descanso

El descanso hace que el trabajo sea más eficiente que si no se descansara. Según varios estudios científicos, sería contraproducente no descansar durante las 8 horas que suele durar la jornada laboral. Esto se debe a que el cerebro sólo tiene la capacidad de concentrarse por un período de tiempo de 90 a 120 minutos. Es por eso que se recomienda hacer un descanso cada 90 minutos aproximadamente, para de esta manera mantener el buen ritmo y un mayor rendimiento en las actividades. Esto es incluso válido para mejorar durante el proceso de aprendizaje.

Otras investigaciones que se realizaron en las universidades de York y California, en Estados Unidos, demostraron que el 40 % de las nuevas ideas y de la creatividad aparecen después de que la persona toma un buen descanso. De nada sirve pasarse todo el tiempo de trabajo esforzándose y sobre esforzándose, ya que esto puede ser en realidad contraproducente. En cambio, cuando se incorpora el descanso al trabajo, se fortalece la creatividad y se incrementa la capacidad laboral.

¿Cómo dormir y descansar profundamente?

Una de las frases que solemos escuchar con frecuencia es esta: “Se puede dormir las 8 horas seguidas recomendadas, pero no haber descansado realmente”. Y es que el dormir y el descansar están relacionados también durante el sueño. En este contexto, descansar hace referencia a lo que se conoce como el sueño profundo o el descanso profundo o reparador. Este es un tipo de descanso diferente del que hemos visto arriba, ya que se trata de un descanso que ocurre en el nivel más hondo del organismo, y que requiere de una buena calidad de sueño para lograrlo.

Cuando al dormir no se logran alcanzar los ciclos de sueño necesarios, es decir, si el sueño se interrumpe, decimos que hemos tenido un sueño ligero y no un sueño profundo. Esto provoca que nos levantemos sin fuerzas y cansados al día siguiente. Ya vimos en un acápite anterior, el titulado «¿Qué es dormir, según la ciencia?», la importancia que para la salud tiene el descanso profundo durante el sueño. Ahora te daremos algunos consejos para poder dormir y descansar profundamente todos los días. Estos consejos mejoran lo que conocemos como la higiene del sueño:

·        Mantener el mismo rango de horario tanto para dormir como para levantarse todos los días, contemplando las 8 horas recomendadas.

·        Evitar la interacción con las pantallas electrónicas de celulares, tabletas o televisores cuando la hora de dormir está cerca.

·        Propiciar un ambiente agradable, limpio y ordenado dentro del dormitorio.

·        Mantener una temperatura ambiente adecuada para dormir, que se mantenga entre los 18 y los 22 grados Celsius, esto es, ni muy fría ni muy caliente.

·        Hacer ejercicios con frecuencia, pero siempre como mínimo 2 horas antes de acostarse, nunca menos.

·        Comer una cena ligera, baja en grasas y con alimentos de fácil digestión.

·        Evitar el consumo de bebidas estimulantes como el café, el té o el chocolate.

·        Evitar tomar alcohol y fumar antes de irse a dormir.

·        Mantener el dormitorio aislado de ruidos que puedan interrumpir el sueño.

·        Tener alguna rutina relajante antes de dormir, como por ejemplo tomar una ducha caliente, escuchar música relajante o meditar.

·        No tener conversaciones de trabajo ni hablar de temas estresantes antes de dormir.